Buenos días y bienvenidos a la ironía que le pongo al día a día, para que pese menos...

martes, 8 de febrero de 2011

Se me perdió el loro

Tengo miles de cosas para decir, siempre tengo miles de cosas para decir pero quizá no encuentro la forma de decirlas y que resulten interesantes, graciosas o al  menos, leíbles.
Y cuando pensaba en la falta de inspiración que me aqueja, me acordé del Unicornio Azul que se le perdió a Baglieto, Silvio Rodríguez y un par más. Esa debe ser la personificación de la inspiración de ellos. Y entonces se me ocurrió que como caballo blanco, perro verde y gato negro ya existen, yo voy a llamar a mi inspiración loro violeta.
Mi loro violeta está un poco callado, no repite ni un “hola” y apenas mueve las alas. Si en lugar de ser mío, el loro fuera de Ricardo Montaner, escribiría todo en doble sentido.
¿Alguna vez prestaste atención a las letras de Montaner? Ese sí que tiene un loro bien raro, sino fijate en estos fragmentos:
-          Como una alfombra de hierba ibas volando dormida (es imposible volar dormida si no te fumas una hierba como la que se fumó el loro de Montaner cuando escribió esta canción)
-          Tanta pasión colgada en la pared (se ve que a la pintura en la que se inspira el loro violeta de Montaner, le llaman pasión. Debe tener paredes rojas y debe fumar sin parar)
-          Emigrando al árbol del limón, elevando un grito hasta amanecer, encima de tu piel (bueno, acá no merece demasiado análisis, se fumó todo lo que tenía a su alcance y se cree Superman el loro)
Hay loros violetas de otros cantantes que son mucho más patéticos que el fumado de Montaner, por ejemplo el de Juan Luis Guerra. Ese loro está enfermo, es un sexópata desenfrenado, sino fíjate:
-          Quisiera ser un pez, para mojar mi nariz en tu pecera (mmmm, qué asco!!! Loro cerdo!!!)
-          Pasar la noche entera, mojado en ti (sin palabras, a ese loro hay que darle con una honda!)
-          Escalar el cielo abierto de tu boca y orbitar en tus galaxias se me antoja (qué loro más pelotudo tiene Guerra!)
El que se caga un poco en las mujeres, es el loro violeta de Arjona. Ese sí que dice lo que quiere sin tener un mínimo de decoro. Fijate esta canción:
-          Tu reputación son las primeras seis letras de esa palabra (loro y la re….. de tu madre, que también debe ser “reputa”!)
-          De vez en mes con tu acuarela pintas jirones de ciruelas que van a dar hasta el colchón (qué delicado el loro, ¡linda forma de decir que le vino a una mujer! ¡De salón!)
Mi loro violeta no escribe canciones. Quizá por eso no tiene ganas de escribir hoy. Yo sí tengo ganas y quiero escribir un montón de cosas sobre un montón de situaciones, anécdotas, circunstancias, etc. Pero mi loro está callado y no quiere saber nada con ponerse a trabajar. Si yo fuera alguno de esos cantantes, ¿qué haría si el loro se negara a trabajar?
Fácil, escribiría más de lo mismo. Ahora que lo pienso, es lo que hacen los cantantes!!!! La mayoría de estos melódicos siempre escriben más de lo mismo, no por falta de originalidad, sino porque su loro está de huelga!
Yo, en cambio, no puedo escribir más de lo mismo. Así es que, por ahora, no voy a escribir nada y cuando el loro se despierte, vuelvo por más.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

MÁS RESPETO CON EL LORO DE ARJONA! yo lo banco!!!

muy bueno el post!

Daniela dijo...

Menos mal que no te olvidaste de Arjona, analizando semejantes creaciones podrias escribir un libro :D