Buenos días y bienvenidos a la ironía que le pongo al día a día, para que pese menos...

lunes, 29 de agosto de 2011

Eureka! Por eso están como están...

No todo es joda. No todo causa gracia y a veces hay que ponerse un poco en el lugar del otro. Yo viví en Estados Unidos. No sé si eso me da derecho a hablar de ellos, pero como todo el mundo habla de todo, con o sin derecho, yo no voy a ser menos. Además, quiero experimentar eso de ser “uno más” o parte de la masa y hacer lo que hacen todos.
Entonces voy a intentar llevar una reflexión a las cabecitas de mis lectores. Quizá ni llegue a una reflexión y solo sea un comentario que puede convertirse en una reflexión en el futuro. Quizá no sea nada, pero igual lo escribo. Después de todo, a mí no me pagan para que los haga pensar o reflexionar, así que no me rompan las pelotas. Bastante con que escribo…
Supongo que nadie es ajeno a los acontecimientos que ocurren en el hemisferio norte, más que nada porque los “Americanos” (sí, ellos son los únicos que viven en América, no conocen ni reconocen nada más debajo de Miami) se encargan de comunicarle al mundo hasta el último gas expulsado por cada habitante.
Con lo cual, habrás estado al tanto de la dimensión que tomó el inminente paso del huracán Irene por Nueva York y alrededores. A propósito, ¿sabes el porqué de los nombres de los huracanes? Te la dejo picando, esa averiguala vos…
En fin, toda una semana torturándonos con los desastres que iba a provocar el huracán, con la desaparición del puente de Brooklyn, con el cierre definitivo del teatro en el que hace 100 mil años está 'Mamma Mía', con pensar en que si nunca fuiste a Nueva York, alpiste…Toda la semana enviando mensajes a los “Americanos” desde los medios de comunicación e incitándolos a que se prepararan para “el día después de mañana”.
Bueno, Estados Unidos es uno de los países número uno en obesidad y ¿sabes por qué? Porque para cualquier cosa que pase, te mandan al supermercado. Si va a llover, al supermercado antes para no mojarse. Si están por declarar la guerra al país más remoto, al supermercado antes por si devuelven el ataque. Si algún rostro no “Americano” pisó el aeropuerto de alguna ciudad del país, al supermercado por si sufren un ataque terrorista. Si se viene un huracán, al supermercado por si quedan aislados por mucho tiempo.
¿Qué tendríamos que hacer los que vivimos en Buenos Aires cada vez que una lluvia imprevista inunda las calles llenas de mugre porque los sucios de mierda que viven en ella sacan la basura cuando se les canta y piensan que los tarros de residuos son maceteros? ¿Copar los chinos?
Porque cualquier titular de diario “Americano” hoy alerta que miles de “Americanos” todavía se encuentran en peligro por inundación de calles y cortes de luz. Es como si no pudieran soportar el hecho de que no pasó nada y ahora, quizá, otro país sea el centro de atención. Funciona como un llamado de atención, un 'ojo que el peligro no pasó, todavía hay agua en algunas calles y.. y... por favor!!! mirennos!!!!!' Ayer hubieron cortes de luz en algunos barrios de por acá y seguimos vivos, así que le pediría al periodismo mundial que me llame y le indico los barrios y calles, para que vengan a filmar acá que también se inunda. ¿No se les habrá ocurrido pensar a los "Americanos" que los medios están entongados con  las cadenas de supermercados? Lindo negocio... 'Pasas las noticias más horribles y catastróficas y te hago descuento en las papas fritas y la manteca de maní'.
También hay que pensar que los “Americanos” toman de su propia medicina. Esta gente mira muchas películas que se hacen allí mismo, en Estados Unidos! Y yo me cansé de la exageración al pedo de esta gente que se cree con derecho a expropiar el nombre de un continente que también me pertenece. Así es que ahí va, con esta primicia los fulmino definitivamente:
“Señores yankees, las películas del fin del mundo, las de las plagas y las tormentas, son de ficción! Dejen de ir al supermercado, porque no van a tener la suerte de desaparecer y seguir siendo el centro del universo. Tampoco van a lograr que limpiemos los restos de cada uno de ustedes luego de que exploten por comer tanto y al pedo! Por favor, por el bien de todos, apaguen los malditos televisores y lean un poco más!”
No me asustan las consecuencias. ¿Qué es lo peor que me puede pasar? ¿Que alguien me revele que el estreno de Natalia Oreiro es una mentira porque ella ya está casada y esta sería su 2° boda? Bueno, ya lo sé y también sé que la vieja de "Esperando la Carroza" es Gasalla y que Suar evidentemente le consiguió un novio a su mujer, porque escuché el otro día que ella sale con un cantante... 
Al final, tanto blablá y no pasó nada, apenas una lluvia en las calles de Manhattan…. No aprenden más. ¿Y??? ¿Ya estás reflexionando? Si no entendiste nada, alquilate 2012. Ese sí que es un peliculón de aquellos. Creería que es francesa la peli...después contame qué te pareció!
 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

una simple corrección:
"Dejen de ir al supermercado, porque no van a tener la suerte de desaparecer y seguir siendo el centro del universo."
Ellos nunca desaparecen, siempre triunfan y quedan vivitos y coleando...los que desaparecemos somos el resto, porq como bien decis, no existe el mundo traspasando los limites de su estado...

Anónimo dijo...

me quede con la duda de porque los nombres? me contas?

Irónica dijo...

Desde 1953, a inicios del año se compila una lista de 21 nombres ordenados alfabeticamente para estos fenómenos climáticos; los más destacables son bautizados con uno de estos nombres a medida que se originan. Estos tienen que ser cortos, sencillos y fáciles de recordar. Se pueden reusar siempre y cuando este no haya sido devastador. Clement Wragge fue el primer meteorólogo en ponerle nombre a un fenómeno climático a principios del siglo veinte. Los estadounidenses lo hicieron de manera formal a mediados de siglo y en un inicio solo elegían nombres de mujeres (en recuerdo a sus novias y esposas).